Por las galerías del Hospital Gutiérrez, íbamos caminando con la Dra. Perla y pasamos por al lado de un adolescente que estaba en silla de ruedas acompañado por sus padres y una médica.
Los adultos hablaban de temas administrativos. El adolescente tenía una cara triste y se veía desmotivado.
Pararon en una esquina y nosotros seguimos caminando. Unos pasos después, nos cruzamos con un nene que, cuando lo quisimos saludar, se asustó.
El adolescente, que miraba la escena, se rió tímidamente.
Entonces empezamos a jugar a asustar, con ese nene y con otros que se iban sumando. Los asustábamos y cantábamos una canción para pedir perdón.
El adolescente, el que estaba en su silla de ruedas con cara triste, se acomodó para vernos mejor. Y se reía cada vez más.
Dr. Amador (Mauro González)
Hospital Gutiérrez